Padres De Un Bebé Recién Nacido

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PUNTOS CLAVE

• Ser padres de un bebé recién nacido es una gran responsabilidad. Es normal no siempre saber qué hacer con el bebé. Mientras estén aprendiendo como cuidar de su bebé, lo más probable es que se sientan poco seguros de sí mismos, cansados, abrumados e incluso un poco frustrados. Sean pacientes y busquen lo que funciona mejor para su situación.
• Los hospitales y clínicas de su zona ofrecen clases donde puede aprender cómo cuidar a su nuevo bebé. Los libros y los sitios web sobre bebés para padres nuevos pueden darles sugerencias sobre el cuidado del recién nacido. No teman pedirles ayuda a familiares o amistades de confianza.

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Ser padres de un bebé recién nacido es una gran responsabilidad. Es normal no siempre saber qué hacer con el bebé. Mientras estén aprendiendo como cuidar de su bebé, lo más probable es que se sientan poco seguros de sí mismos, abrumados e incluso un poco frustrados. Observen a otras personas, hagan preguntas y descubran lo que funciona mejor para su situación.

Los hospitales y clínicas de su zona ofrecen clases donde puede aprender cómo cuidar a su nuevo bebé. Los libros y los sitios web sobre bebés para padres nuevos pueden darles sugerencias sobre el cuidado del recién nacido. No teman pedirles ayuda a familiares o amistades de confianza. No obstante, está bien tratar de hacer algo distinto si el consejo que les han dado no funciona para ustedes. Cada bebé es distinto, y ustedes son padres distintos que su amistad o pariente. Si les preocupa la salud de su bebé, hablen con su profesional médico.

Mostrándole su bebé amor y afecto a través de la alimentación, tenerlo en brazos, abrazos, jugar y cambiar los pañales ayuda a su bebé a sentirse seguro. Los bebés aprenden sobre el mundo por medio de sus sentidos. Sostener su bebé firme pero suavemente, ayudará que el bebé se sienta seguro. Puede que se preocupen que su bebé sea frágil y lo van a dejar caer. Pero no dejen que sus temores les impidan gozar de su bebé. El contacto cercano con su bebé le permitirá al bebé conocerlos y confiar en ustedes. Al cumplir con las necesidades de su bebé irán ganando confianza en sus destrezas de crianza.

Instalarse

• Puede que quieran tomarse una licencia de paternidad o maternidad si la tienen disponible. Recuerden que hay pocas cosas en su trabajo que no pueden esperar, pero su hijo es recién nacido una sola vez. Ambos padres pueden querer tomar licencia por una o dos semanas después de que la madre y el bebé vuelvan a casa del hospital.
• Colabore con su pareja para averiguar cómo compartir las tareas y cómo cuidar a su bebé. Pidan ayuda a sus familiares o amistades para hacer las compras, la limpieza o para cocinar, de ser necesario. Dejen que los demás les ayuden con las tareas del hogar en vez de tratar de hacerlo todo ustedes mismos.
• Sostener y hablar con su bebé y hacer contacto visual con su bebé aumentará el vínculo que los une.
• Compartir la atención de su pareja con su nuevo bebé puede dejar poco tiempo para el otro. A veces, puede parecer que ya no son una pareja. De vez en cuando trate de que alguien cuide a su bebé para que puedan compartir tiempo a solas. Les ayuda a conectar el uno con el otro de vez en cuando, aunque sólo sea para hacer una caminata de 10 minutos juntos.

Salud

• La mayoría de los recién nacidos necesitan comer y tener cambios de pañales y ser consolados cada 2 a 3 horas, incluso por la noche. Puede que ustedes no duerman una noche entera por varios meses. Descansen lo más que puedan. Necesitan dormir para restaurar su energía. Duerman la siesta al mismo tiempo que su bebé.
• Cuídese. Traten de comer bien y ejercitarse, aunque sus horarios se hayan alterado. Diez minutos caminando o haciendo otro ejercicio pueden ser un buen comienzo. Aunque el bebé sea ahora su prioridad, es importante que se tomen tiempo para hacer las cosas que gozan. Cuidarse de sí mismos les ayuda a mantenerse relajados, en forma, y les ayuda a cuidar de su bebé.

Apoyo

• Cuándo se concentran en ser padres nuevos, les puede resultar difícil servirles de apoyo a sus amistades. Siguen necesitando a sus amistades, y sus amistades todavía los necesitan a ustedes. Pasen momentos con ellos cuando tengan tiempo y energía. Compartan las cosas que pasan en sus respectivas vidas. Sus amigos puedan ayudarle a mantener el equilibrio.
• Las amistades son una inversión de tiempo y energía, que son muy escasos cuando ustedes se vuelven padres. La crianza de los hijos puede afectar sus amistadas, especialmente durante los primeros años de la vida de su bebé. Mientras cuiden de su recién nacido, puede serles útil estar alrededor de otros padres y madres de bebés que están pasando por muchas de las mismas cosas. Podría unirse a un grupo de apoyo para padres o encontrar amistades que también tengan niños pequeños.
• Las necesidades financieras de los bebés, como el costo del parto, cuidados de salud, pañales y ropa se pueden acumular rápidamente. Estos gastos generalmente aumentan según va creciendo su hijo. Puede que quiera hablar con un planificador financiero acerca de cómo cuidar de su familia ahora y en el futuro.

Relaciones sexuales

• Los padres nuevos tienden a dormir menos a causa del horario de dormir del bebé. También es estresante tratar de proteger y cuidar de su bebé, además de cumplir con sus actividades diarias. Es posible que sientan que no queda energía para las relaciones sexuales. Además, el cuerpo de una mujer necesita tiempo para la recuperación física después de dar a luz. Es normal que el deseo sexual de una madre sea bajo en las primeras semanas o a veces meses de haber llegado el bebé. Sea paciente.
• Las relaciones sexuales pueden ser una forma de ayudar a aliviar el estrés y recordarle que siguen siendo una pareja. Tómelo un paso a la vez. Traten de acostarse juntos a la misma hora. Hablen entre sí sobre los cambios que están viviendo y cómo apoyarse mutuamente. Incluso si están demasiado cansados para tener relaciones sexuales, tomen un momento para tocar a su pareja y sentirse conectados. Puede ser útil programar un tiempo para los dos. Por ejemplo, “Ahora estoy muy cansado. ¿Qué tal si nos citamos para el sábado por la noche?" Consigan una niñera o dejen al bebé con una amistad cercana o un pariente, y salgan con su pareja.
• Una mujer puede quedar embarazada de nuevo solo semanas después de dar a luz, incluso si amamanta. Usar anticonceptivos le da tiempo al cuerpo a recuperase y le da tiempo a gozar de su nuevo bebé.

Emociones

Las emociones de ser padres nuevos van desde la alegría al pánico. Si se siente frustrada, deprimida, enojada o incapaz de cuidar de sí misma o de su bebé, hable con alguien. Puede ser útil hablar con su pareja, una amistad o un pariente de confianza, un consejero o su profesional médico. Si alguna vez le vienen ganas de sacudir o lastimar a su bebé, deténgase, coloque al bebé en un lugar seguro y tómese un descanso tranquilo para calmarse. Llamen a una amistad o a un pariente para que les brinden apoyo o cuiden a su bebé por un corto plazo. JAMÁS lastime o sacuda a un bebé.

Algunas mujeres se sienten tristes o a punto de llorar en algún momento durante el primer año de vida del bebé, lo que frecuentemente se conoce como “melancolía del posparto”. Esto está causado por cambios repentinos en las hormonas, falta de sueño y cambios en el estilo de vida. En la mayoría de las mujeres, la melancolía del posparto es leve y desaparece en unas semanas. La depresión vinculada al embarazo y el parto dura más tiempo, es más grave y dificulta el manejo de sus tareas diarias. Se puede llamar depresión puerperal o del postparto. Los síntomas pueden incluir:

• Sentirse incapaz o sin ganas de cuidar a su bebé
• Pensar con frecuencia sobre las cosas malas que le podrían pasar a su bebé o sentirse impulsada a hacerse daño a sí misma o a su bebé
• Problemas para vincularse a su bebé
• Estar irritable
• Tener problemas para dormirse, despertarse muy temprano o dormir demasiado
• Sentirse abrumada por las actividades cotidianas, como bañarse o lavar la ropa
• Tener disminución del apetito o comer demasiado
• Sensación de mucho cansancio
• Desinterés en el sexo
• Sensación de culpabilidad o de que no vale nada
• Sentir miedo o pánico
• Incapacidad para concentrarse o recordar cosas
• Sentirse sin esperanza o que no le importa nada
• Tener dolores sin explicación o dolores de cabeza
• Preocupación que usted es una mala madre y nunca va a sentirse mejor

Si usted tiene algunos de estos síntomas y no desaparecen en un plazo de unas semanas, es importante obtener tratamiento lo antes posible.