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Trastorno Por Uso De Inhalantes: versión para adolescentes

(Inhalant Abuse and Dependence: Teen Version)

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PUNTOS CLAVE

  • El trastorno por uso de inhalantes es un patrón de uso de inhalantes que lleva a problemas personales, familiares y de salud. Cuando se respiran por la nariz o la boca, los inhalantes pueden hacer que te sientas aturdido o indiferente.
  • El trastorno por uso de inhalantes se puede tratar. Para que cualquier tratamiento pueda tener éxito, tienes que estar dispuesto a dejar de usar inhalantes. Tu profesional médico quizás te recete un medicamento para ayudarte a superar los síntomas de abstinencia. Los grupos de autoayuda como Narcóticos Anónimos, los grupos de apoyo y la terapia te pueden ayudar.
  • La mejor manera de ayudarte a ti mismo es consultando con un profesional médico y haciendo planes para dejar de abusar inhalantes.

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¿Qué es un trastorno por uso de inhalante?

Inhalantes son productos químicos que producen vapores químicos. Inhalantes se pueden aspirar o inhalar por la nariz o la boca. Esto también se llama "sniffing", "huffing", o "bagging". Estos productos entran en el torrente sanguíneo rápidamente y causan síntomas que pueden poner en peligro la vida. Existen muchos tipos de inhalantes. Algunos de los alucinógenos más comunes son:

  • La gasolina
  • Los aerosoles como pinturas, desodorantes y lacas para el cabello
  • Óxido nitroso, a veces llamado gas de la risa
  • Pegamento
  • Marcadores de felpa
  • Disolvente de pintura y quitaesmalte de uñas
  • Líquido para los encendedores y líquidos de limpieza

Los niños pequeños y adolescentes pueden obtener muchos de estos productos fácilmente, lo cual hace que sea más probable que abusen este tipo de drogas. Inhalar un producto como pegamento o líquido para los encendedores puede poner en peligro la vida.

Nitrito de amilo ("poppers" en inglés) es un inhalante que se usa para intensificar las emociones cuando se tiene sexo. Si usas nitrato de amilo, es posible que no mantengas relaciones sexuales seguras, lo cual te pone en riesgo de infectarte con VIH/SIDA.

El trastorno por uso de inhalantes es un patrón de uso de inhalantes que lleva a problemas personales, familiares y de salud. Cuantas más de estas declaraciones se apliquen a ti, más grave es tu trastorno por uso de inhalantes.

  1. Usas más inhalantes o los usas por más tiempo de lo que tenías programado.
  2. Quieres reducir la cantidad que usas o quieres dejarlos por completo, pero no puedes.
  3. Inviertes mucho tiempo y energía obteniendo drogas, usando drogas y superando los efectos.
  4. Tienes tanta necesidad de inhalantes que te resulta difícil pensar en otra cosa.
  5. Tienes problemas en el trabajo o el colegio, o dejas de cuidar a las personas que dependen de ti.
  6. Tienes problemas de relación porque no cumples tus promesas, o discutes o te pones violento con los demás.
  7. Dejas de hacer cosas que te resultaban importantes como los deportes, pasatiempos, o pasar un rato con la familia o las amistades a causa de tu uso de inhalantes.
  8. Usas inhalantes aun cuando es peligroso, como cuando manejas u operas maquinaria.
  9. Continúas usando inhalantes a pesar de que sabes que te están dañando la salud física o mental.
  10. Necesitas usar más y más inhalante o usarlos con mayor frecuencia para obtener los mismos efectos. Esto se conoce como tolerancia.
  11. Tienes síntomas de abstinencia cuando los dejas de usar.

El trastorno por uso de inhalantes también se puede llamar abuso de droga, abuso de sustancias, dependencia o adicción.

¿Cuál es la causa?

No se conoce la causa del trastorno por uso de inhalante. El cerebro produce sustancias químicas que afectan los pensamientos, las emociones y las acciones. Los inhalantes cambian el equilibrio de estas sustancias químicas en tu cerebro. Cuando usas inhalantes, tu cerebro comienza a acostumbrarse a ellos. Algunos de estos cambios pueden durar incluso después de haber dejado de usar inhalantes.

Correrás un riesgo mayor de ser dependiente de las drogas si:

  • Tienes antecedentes familiares de abuso de alcohol o drogas
  • Has abusado de alcohol o drogas anteriormente
  • Fuiste abusado o maltratado de niño
  • Te frustras con facilidad, tienes problemas para lidiar con el estrés o sientes que no eres lo suficientemente bueno
  • Frecuentas regularmente con personas que toman alcohol o usan drogas
  • Tienes un problema de salud mental
  • Tienes dolor continuo

¿Cuáles son los síntomas?

Los síntomas del trastorno por uso de inhalantes dependen de cuánto y qué tan frecuentemente usas la droga. Los síntomas pueden ser desde leves a graves, como, por ejemplo:

  • Tener mal juicio
  • Pérdida de autocontrol
  • Sentirte torpe, inestable y débil
  • Sentirte aturdido o indiferente
  • Sentirte mareado, desmayarte o tener visión borrosa
  • Tener náusea, vómito o pérdida del apetito
  • Ver, oír o sentir cosas que no existen
  • Sensación de sueño con dolor de cabeza que dura mucho tiempo
  • Tener indicios de daño cerebral, como tener problemas de memoria o no poder aprender cosas nuevas o no poder llevar una conversación sencilla
  • Convulsiones y coma

Si usas inhalantes por mucho tiempo, es posible que tengas indicios de daño a tus nervios y músculos, tales como problemas para caminar, agacharse y hablar. También te puede dañar el cerebro, los pulmones, el corazón, el hígado y los riñones.

El uso de inhalantes puede llevar a la depresión, ansiedad, abuso otras drogas y pensamientos de suicidio.

Aspirar una gran cantidad de inhalantes de una vez puede causar la muerte en pocos minutos, aunque seas una persona con buena salud.

Si estás embarazada y usas inhalantes, es posible que tu bebé tenga problemas de aprendizaje, crecimiento y problemas de comportamiento.

¿Cómo se diagnostica?

Su profesional médico le preguntará cuánto y con qué frecuencia usa inhalantes. Sea franco acerca de su consumo de droga. Su profesional médico necesita esta información para darle el tratamiento adecuado. También le preguntará por sus síntomas e historia clínica y lo examinará. Puede que le haga análisis de sangre u orina.

¿Cómo se trata?

El trastorno por uso de inhalantes se puede tratar. Para que cualquier tratamiento pueda tener éxito, tienes que estar dispuesto a dejar de usar inhalantes. No trates de usar alcohol u otras drogas para reducir los síntomas de abstinencia. Es posible que tu profesional médico te recete un medicamento para ayudarte a superar los síntomas de abstinencia.

Si quieres dejar de usar la droga, obtén ayuda.

Los grupos de autoayuda como Narcóticos Anónimos, los grupos de apoyo y la terapia te pueden ayudar. Tipos de terapia pueden incluir:

  • Terapia Cognitivo Conductual (TCC). La TCC te ayuda a analizar tus pensamientos, creencias y acciones, y comprender cuáles te causan problemas. A continuación, aprendes a cambiar las formas poco saludables de pensar y comportarte.
  • Terapia Familiar. Frecuentemente las personas con trastornos por consumo de sustancias no se dan cuenta que tienen un problema o no están listos para aceptar tratamiento. Esto deja a los seres queridos frustrados y confundidos. La terapia familiar trata a todos los miembros de la familia en vez de trabajar con solo una persona. Ayuda a toda la familia a comprenderse mejor los unos a los otros y a hacer cambios.
  • Programas de tratamiento para el abuso de sustancias. Tus profesionales médicos y terapeutas trabajarán contigo para elaborar un programa de tratamiento. Es posible que puedas ir a terapia unas veces por semana (terapia de paciente ambulatorio). O es posible que necesites tratamiento en un hospital o centro de rehabilitación. Es posible que tengas que permanecer ahí varias semanas, o es posible que puedas ir a una clínica u hospital cada día.

La recuperación es un proceso de largo plazo. Muchas personas con trastornos por consumo de sustancias intentan dejarlas más de una vez antes de finalmente tener éxito. No te des por vencido. Puedes dejarlo y dejarlo para siempre. Obtén ayuda e inténtalo de nuevo. El tratamiento de seguimiento es muy importante para no volver a usar las drogas.

Si tienes una sobredosis o síntomas graves de abstinencia, tendrás que recibir tratamiento en un hospital. También serás tratado por cualquier problema de salud asociado, como un ataque al corazón, accidente cerebrovascular u otros problemas que ponen en peligro la vida.

¿Cómo puedo cuidarme?

La mejor manera de ayudarte a sí mismo es consultando con un profesional médico y haciendo planes para dejar de usar inhalantes. Si ya has consultado a un profesional médico, es importante que completes el curso de tratamiento completo tal como te lo han recetado.

  • Busca apoyo. Habla con tu familia y amistades. Considera unirte a un grupo de apoyo en tu área.
  • Aprende a manejar el estrés. Pide ayuda en casa, el colegio y el trabajo cuando la carga sea demasiado pesada. Encuentra maneras de relajarte. Por ejemplo, dedicate a un pasatiempo, escucha música, ve películas o haz caminatas. Prueba hacer yoga, meditación o ejercicios de respiración profunda cuando te sientas estresado.
  • Cuida tu salud física. Intenta dormir un mínimo de 7 a 9 horas cada noche. Sigue una dieta saludable. Limita la cafeína. Si fumas o usas cigarrillos electrónicos, deja de hacerlo. No tomes alcohol ni uses drogas. Mantente físicamente activo conforme te lo recomiende tu profesional médico.
  • Evita las situaciones donde las personas están propensas a tomar alcohol o usar drogas.
  • Controla tus medicamentos. Para ayudar a prevenir problemas, informa a tu profesional médico y a tu farmacéutico sobre todos los medicamentos, remedios naturales, vitaminas y otros suplementos que tomas.
  • Comunícate con tu profesional médico o terapeuta si tienes alguna pregunta o si tus síntomas parecen estar empeorando.

Las personas y recursos en tu comunidad que pueden ayudarte incluyen profesionales médicos, terapeutas, grupos de apoyo, centros para la salud mental y programas de tratamiento para el abuso de alcohol y otras sustancias.

Para obtener más información, ponte en contacto con:

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Pediatric Advisor 2022.1 published by Change Healthcare.
Last modified: 2021-07-27
Last reviewed: 2018-04-02
Este material se revisa periódicamente y está sujeto a cambios en la medida que aparezca nueva información médica. Se proporciona sólo para fines informativos y educativos, y no pretende reemplazar la evaluación, consejo, diagnóstico o tratamiento médico proporcionados por su profesional de atención de la salud.
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