________________________________________________________________________
PUNTOS CLAVE
________________________________________________________________________
Los deportes son actividades físicas que permiten que los niños usen su energía, mantengan un peso saludable, desarrollen coordinación y adquieran fuerza. Los deportes pueden ayudarle a su hijo a aumentar su confianza y reducir la ansiedad, depresión y el estrés. Deportes también ayudan a enseñar habilidades para la vida como trabajar en equipo, tener liderazgo, paciencia y cómo establecer metas.
Antes de permitirle a su hijo a participar en un deporte, asegúrese de que esté listo. Estar listo significa que su hijo está física, mental y socialmente preparado para las exigencias del deporte.
El 20% de los niños de los EE. UU. tiene sobrepeso. Estos niños están más propensos a ser adultos con sobrepeso, lo que puede aumentar su riesgo de diabetes, presión arterial alta, enfermedad cardíaca y otros problemas de salud. Practicar deportes es una buena manera de hacer que el ejercicio sea divertido y ayudarle a su hijo a aprender hábitos saludables.
Jugar deportes puede aumentar la autoestima de su hijo. Dar y recibir aliento y respeto de sus pares puede ayudarle a su hijo a sentirse bien consigo mismo. El consumo de drogas y alcohol es menos común en los adolescentes que practican deportes.
Los deportes también pueden ayudar a enseñarle a su hijo cómo manejar sus emociones, como cuando se siente frustrado al no hacer las cosas bien o está enojado por perder. Los deportes también le ayudan a su hijo a aprender a resolver problemas, tales como la forma de conseguir que los miembros del equipo trabajen juntos. Encontrar tiempo para la escuela y los deportes puede enseñarles a los niños cómo manejar mejor su tiempo. Formar parte de un equipo deportivo puede enseñar a los niños lo que es el compromiso y los beneficios de esforzarse. Los estudios demuestran que los niños que practican deportes se esfuerzan más en el salón de clases.
La mayoría de los niños pueden comenzar a jugar deportes en equipo organizados cuando tienen 5 o 6 años. El baloncesto y el fútbol son buenos deportes que aprender hasta para niños pequeños. Piense en qué tipo de tiempo, dinero y compromiso exige tanto de usted como de su hijo. Su hijo podría intentar deportes en la escuela, practicar danza, o ir a clases de gimnasia. Si su escuela no ofrece programas de este tipo, use otros recursos comunitarios, como las organizaciones de jóvenes (YMCA, por sus siglas en inglés) o su distrito local de parques y recreación. Busque un programa que coincide con las habilidades de su hijo y fomente la participación de cada niño. El programa debe enfocarse en ayudar a su hijo a aprender y divertirse en vez de sólo enfocarse en ganar.
Anime a su hijo a que pruebe más de un deporte. Concentrarse en un solo deporte puede hacer que el niño se agote. Consulte con su hijo con regularidad y asegúrese de que su hijo se está divirtiendo.
No todos niños disfrutan los deportes en equipo. Algunos niños son mejores en los deportes individuales como el karate. Pregúntele a su hijo qué le interesa y qué deporte piensa que es divertido.
Aprenda acerca del deporte y participe si puede. Hable con los entrenadores y otros padres para asegurarse de sentirse cómodo con ellos.
Practique con su hijo. Asista las prácticas y juegos. No se enoje ni le grite al entrenador, a los otros jugadores, a otros padres, al árbitro ni a su hijo. Su hijo aprende observándole a usted. Mantenga la calma.
Sea realista a la hora de crearse expectativas con respecto a su hijo. No se concentre en futuras becas para la universidad ni en carreras profesionales. Esto puede ejercer demasiada presión en su hijo. Muy pocos niños serán atletas profesionales cuando crezcan.
Elogie el esfuerzo, no sólo los resultados. Si su hijo no llegara a formar parte del equipo, dígale a su hijo lo orgulloso que está de que lo intento. Aunque su hijo no sea "el primero" o "el mejor" o "perfecto" en un evento o actividad, usted puede elogiarlo por ir mejorando. Ayude a su hijo a afrontar la decepción y la derrota. Pregunte acerca de los miembros del equipo y el entrenador. Reste importancia a la competencia. Haga hincapié en la diversión. Si el deporte deja de ser divertido para su hijo, ayúdele a encontrar un interés nuevo.